Trabajar de Au pair en Miami consiste en ir a desempeñarnos al extranjero trabajando en casas de familia, donde nos ocuparemos de la tareas hogareñas y de cuidar a los niños. Si se te presenta esta oportunidad, no te la pierdas. Volá a Miami para disfrutarla y para enriquecerte personal y profesionalmente.

Hay varias opciones para lograr esto: viajar por placer, que nos envíen de algún trabajo, ir a estudiar o hacer un poco de todo yendo a trabajar como Au pair. De esta manera trabajaremos, conoceremos, nos enriquecernos y hasta ganaremos dinero. Es la opción ideal para los jóvenes que desean volar más allá de las fronteras y conocer todo el mundo mientras ganan experiencia.

La palabra Au pair tiene sus orígenes en Francia: era usada en la antigüedad para denominar a la persona seleccionada para trabajar en una casa, según la modalidad de intercambio cultural (exactamente lo mismo que se hace hoy en día).

Las familias que buscan a estas jóvenes suelen tomarlas como empleadas por 12 meses y a cambio les dan hospedaje gratuito, comida y una pequeña remuneración económica.

La mayoría de las personas que trabaja bajo este modelo son estudiantes que vuelan a diversos países para aumentar su conocimiento.

Una de las grandes ventajas de esto es que estando fuera podremos perfeccionar la lengua extranjera y conocer una cultura diferente, lo cual es muy valioso en estos días de globalización que nos unifican. 

Si queremos realizar esta experiencia Miami es un destino excelente, porque además de trabajar allí podremos disfrutar de esta ciudad sin igual. Pero antes que nada debes planificar esta idea.

Primero hay que saber que no podrás organizar tu viaje sola, sin la ayuda de las diversas organizaciones reguladas y aprobadas por el gobierno estadounidense que existen en el mercado y se dedican exclusivamente a esto.

Serán las encargadas de tramitar todo el intercambio y de sellar el famoso y requerido formulario para el visado J-1. Es por esto que siempre tenemos que registrarnos en una agencia y presentar ante ella todos los documentos requeridos.

Una vez que esto esté terminado pasaremos al siguiente paso: tener una entrevista en inglés y someternos a un test psicométrico para corroborar que nuestro perfil sea el indicado.

El propósito de estas evaluaciones es que la familia que esté interesada en contratarte te conozca. 

Para poder comenzar a trabajar se nos pide una serie de requisitos, son muchos pero no son complicados de demostrar.

En principio tenemos que estar dispuestos a quedarnos, por lo menos, 12 meses en el país; tener entre 18 y 26 años; conocer a la perfección el idioma inglés; demostrar 200 horas de experiencia cuidando a niños, como mínimo; adjuntar a tu curriculum tres cartas de referencia escritas por personas empleadoras que no sean parientes; demostrar haber superado 12 años de estudios; presentar un certificado policial de antecedentes penales y un certificado de apto médico para chequear que no arrastremos ninguna enfermedad contagiosa.

¿Un consejo? Si tenés experiencia conduciendo y contás con la licencia escribilo en tu curriculum, será muy valorado por quienes quieran contratarte, ya que suelen pedirle a los empleados que sean los encargados de llevar e ir a buscar a los niños a todas partes.

El visado te permite una estadía para trabajar allí de hasta 12 meses, justo el tiempo que te piden que trabajes, para que los menores no cambien de persona que los cuida cada pocos meses y se sientan desorientados.

Igualmente contamos con la ventaja de poder prolongar nuestra estancia otros seis, nueve o 12 meses más si así lo requerimos y lo deseamos, para seguir recorriendo todo como turistas. 

Una vez que seas aceptada por el gobierno y alguna familia deberás presentarte personalmente en la Embajada estadounidense de tu país y allí recibirás los pasajes de ida y vuelta, que te los paga tu empleador junto con la promesa de entregarte darán una habitación propia y comida, más un seminario de introducción, una paga semanal, diez días de vacaciones pagadas, un día y medio de tiempo libre a la semana y un fin de semana libre entero al mes además de un contrato de trabajo de 45 horas a la semana. Será, sin dudas, una oportunidad única que te permitirá crecer a pasos agigantados. 

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